Responsabilidad médica en licencias médicas

Este es un tema muy interesante del que vale la pena hablar. La responsabilidad médica es un tipo de responsabilidad que busca esclarecer los casos o situaciones en las que un profesional que ejerce la medicina debe responder civil o penalmente cuando se dan ciertas condiciones y se cumple con determinados requisitos. En general, dependiendo del tipo de responsabilidad, los activadores serán en general la culpa, la negligencia o el resultado, y, ¿qué pasa con las licencias médicas?

No es la idea el hacer una revisión jurídica de la responsabilidad médica, pues escapa dicha pretensión de lo que se puede conseguir en un artículo informativo. Sin embargo, sí vale la pena mirar qué dice la legislación en torno a la responsabilidad de los médicos en el mundo de las licencias médicas.

En general la licencia médica es un derecho, lo hemos dicho varias veces, pero que nace a propósito del acto médico de emitir una licencia médica que prescribe reposo a un trabajador cuando el tratamiento prescrito amerita reposo. Este análisis lo hace el tratante, nadie más puede hacerlo por él. Esto quiere decir que depende de su criterio, conocimiento, evaluación y diagnóstico la emisión del reposo. Cuando una licencia médica llega a la contraloría médica del ente fiscalizador (Isapres o COMPIN), lo que se analiza es la correspondencia del reposo, esto es, que se haya prescrito el mismo con diligencia, fundamentos y antecedentes. Cuando no ha sido así, deben solicitarse más antecedentes, si se cuenta con todos ellos, puede rechazarse por razones fundadas – lo que generalmente no ocurre.

La responsabilidad del médico incluye al tratante y a los contralores médicos. Sí, los que fiscalizan el correcto uso de licencias médicas están sometidos a una responsabilidad administrativa por el control que realizan. Rechazar sin fundamento también es fiscalizable y debe amerizar un sumario en caso de que se corrobore ha sido negligente o el perjuicio que ocasione al trabajador es imputable a dolo o culpa.

En Chile la ley 20.585 sobre Otorgamiento y Uso de Licencias Médicas trata la responsabilidad médica en sede administrativa, estableciendo ciertas y determinadas condiciones sobre las cuales se debería abrir un sumario administrativo al facultativo que emite los reposos médicos o al contralor médico, según sea el caso.

Los factores que desencadenan la fiscalización o sumario son la emisión de reposo sin fundamento médico. Esta carencia de fundamento no basta en que se justifique en la desavenencia de la contraloría médica, debe tratarse de una falta evidente, la ley habla de “evidente ausencia de fundamento”. Por ende, la pregunta que toca hacerse es ¿qué se entiende por evidente ausencia de fundamento? Si se recurre a la legislación vigente (Código Sanitario, Constitución Política, circulares, Lex Artis en general), se podrá constatar que lo que se busca corroborar es que el actuar médico se enmarque en una práctica médica aceptada. No se busca que haya tomado la mejor decisión o haya acertado en el diagnóstico, los médicos son humanos y también se equivocan. Por eso, no sirve que se constate un error, sino que el mismo sea inexcusable por estar fuera de la práctica médica conocida o aceptada.

En el caso de las licencias médicas, para que esto ocurra debería tratarse de una persona a la que se le prescribe reposo sin consulta médica, visita, anamnesis o probándose que el trabajador nunca estuvo enfermo – salvo el caso en que el trabajador engaña al médico.

En otro artículo, veremos los efectos de la responsabilidad para saber a qué se arriesgan los tratantes y contralores médicos que actúan al margen de la ley.

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