¿Qué es la fuerza mayor y por qué importa?

La fuerza mayor es un concepto muy importante de conocer, sobre todo cuando hay algún plazo que se haya incumplido. Como en todo lo relacionado con el Derecho, los plazos tienden a ser fatales, esto quiere decir que, si se incumplen, pues la sanción es la imposibilidad de cumplir con la presentación o envío de los antecedentes requeridos. En el caso de las licencias médicas, los plazos siempre hay que tenerlos presentes para ahorrarse problemas.

Los plazos en el caso de la tramitación de licencias médicas, en general, están bien establecidos. Así, el Reglamento de Autorización de Licencias Médicas contempla plazos de presentación y tramitación para las licencias (de parte del trabajador y empleador), así como también, plazos para las entidades fiscalizadoras de las mismas (Isapres y COMPIN). En caso de incumplirse dichos plazos, siempre hay una sanción o consecuencia. En el caso de la presentación extemporánea de una licencia por parte del empleador, la sanción es el rechazo de la misma.

Si el retraso en la tramitación proviene del empleador, la sanción puede ser el pago del subsidio al que de lugar la licencia (en caso de autorizarse) de parte de la empresa que tramitó tardíamente el instrumento.

Cuando tiene que reclamarse contra una resolución también existen plazos, aunque en estos casos el reglamento es difuso. Los plazos están contenidos en otras normas legales, que no viene al caso comentar acá, pero también deben respetarse si no se quiere que la presentación del reclamo, reposición o apelación se considere extemporánea.

Entonces ¿dónde entra la fuerza mayor? Pues cuando se ha incumplido un plazo. Este concepto puede definirse como aquella circunstancia que no ha podido ser prevista o evitada, y que ha imposibilitado absolutamente el cumplimiento de una obligación. La definición legal de la misma se encuentra en el artículo 45 de nuestro Código Civil.

Un ejemplo claro de esto se encuentra en una licencia emitida más allá del plazo legal por haberse encontrado el médico sin horas disponibles, haberse accidentado, encontrarse enfermo o haber tenido alguna urgencia. Otro caso es el de haber sufrido el propio trabajador una enfermedad, accidente o impedimento sin que nadie pudiere ayudarle a presentar el documento al empleador. Cuando esto ocurre, lo que debe hacerse es alegar dicha circunstancia en la presentación o reclamo que se haga.

No explicar que se ha sufrido una fuerza mayor, hace luego muy difícil controvertir la extemporaneidad de una presentación. Siempre que se pueda, tiene que alegarse el problema que se ha tenido y ha imposibilitado presentar un antecedente dentro de plazo.

Requisitos de la fuerza mayor

Como en todas las cosas en Derecho, la fuerza mayor tiene requisitos para ser alegada o utilizada. Son sencillos, pero precisos, por eso los comentaremos a continuación.

1. Tiene que tratarse de un hecho imprevisible;
2. Tiene que ser imposible de resistir; y
3. Tiene que provenir de una causa externa o ajena a la voluntad de quien se vale de ella.

Entonces, si se va a alegar fuerza mayor sobre el incumplimiento del plazo porque se tuvo que ir a un matrimonio, claramente no será considerado. Ahora bien, si camino a la presentación del antecedente se sufrió un accidente o el día en que se cumplía el plazo se tuvo que ir a urgencias, claramente se cumple con los requisitos.

La idea es evitar que las personas se valgan de la fuerza mayor para incumplir los plazos previstos en la ley en la presentación de documentos, antecedentes y recursos.

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